La evolución de la tecnología nos ha traído nuevos avances en aparatos ortodónticos, ofreciendo una calidad, y una comodidad mucho mayor para el paciente. Los brackets autoligables es una de estas nuevas incorporaciones en salud dental y es que por ello que, desde Clínica Dental Eduardo López, en el artículo de hoy, abordaremos la definición, ventajas y colocación de estos brackets autoligables.

¿Qué son los brackets autoligables?

Estos brackets ayudan a corregir la mordida y la alienación de los dientes sin requerir ligaduras elásticas o metálicas, es decir, son coloquialmente llamados brackets sin goma, y es que no necesitan sujetar el arco metálico que guía el movimiento de los dientes.

El sistema más revolucionario para este tipo de brackets autoligables es el sistema Damon, en Clínica Dental Eduardo López trabajamos con este sistema pues es un mecanismo de tapa pasivo que mantiene el arco del bracket al mismo tiempo que permite que se mueva libremente. Gracias a esto, la fricción se reduce, por lo que los dientes se mueven con rapidez y de una forma mucho más cómoda y eficaz.

Ventajas del uso de brackets autoligables

El uso de estos brackets ofrecen muchas ventajas tanto para el tratamiento como para la comodidad del propio paciente:

Menor Fricción y Mayor Comodidad: es una de las principales ventajas de los brackets autoligables y que reducen la fricción entre el arco y el propio bracket. Esto implica que los movimientos que se realizan son mucho más suaves y eficientes, lo que resulta más cómodo y menos molesto para el paciente. Que provoque menor fricción facilita los movimientos rápidos y precisos del diente haciendo que el tratamiento sea mucho más efectivo.
Menor Duración del Tratamiento: Los tratamientos con brackets autoligables, normalmente suelen tener un periodo de tiempo más corto en comparación con los tratamientos tradicionales. Su efectividad es mucho más alta, pero todo depende en función de cada caso.
Visitas al Ortodoncista Menos Frecuentes: Con los brackets autoligables, las citas de ajuste suelen ser menos frecuentes, ya que el sistema no depende de ligaduras elásticas que necesiten ser reemplazadas regularmente. Esto representa una ventaja significativa para los pacientes con agendas más ocupadas o horarios libres reducidos.
Mejor Higiene Oral: la higiene oral en la boca con los brackets puede ser muy complicada. Con el empleo de brackets tradicionales, según un estudio, se acumula mucha más placa bacteriana pues las ligaduras elásticas son propensas a producir sangrado gingival y acumulación de restos de comida. Es por ello que los brackets autoligables facilitan una mejor higiene oral reduciendo el riesgo de problemas como caries y enfermedades de las encías durante el tratamiento ortodóntico.
Estética Mejorada: Aunque los brackets autoligables pueden ser de metal, también están disponibles en versiones de cerámica o transparentes, lo que los hace menos visibles y más estéticos, una opción atractiva para adolescentes y adultos que buscan tratamientos menos notorios.
Mayor costo pero mejores resultados: aunque este tratamiento de brackets sin goma suponga una mayor inversión que otros tratamientos tradicionales, su tecnología avanzada y materiales especiales garantizan una mayor eficacia del tratamiento y una mejora en términos de comodidad y duración que justifican ese costo.

¿Cómo se colocan los brackets autoligables?

Este procedimiento es realizado por un ortodontista profesional, y aunque es muy parecido al procedimiento tradicional, tiene algunas variaciones por el diseño de los mismos. Estos serían los pasos a llevar a cabo para lucir tus brackets autoligables:

Evaluación inicial y planificación

Se debe realizar una evaluación completa, un examen clínico donde se inspeccione visualmente la alienación y la mordida. A partir de radiografías observar cuál es la estructura ósea del paciente y realizar la detección del problema. Tomar fotografías o escanear digitalmente la boca del paciente es una buena forma de ayudar con la planificación del tratamiento.

Preparación de los dientes

El ortodoncista antes de comenzar con la colocación del tratamiento, debe realizar una limpieza profunda para eliminar cualquier resto de placa o sarro. Una vez limpios, deben estar completamente secos, para ello, se aíslan los dientes con rollos de algodón o un dispositivo de retractor de mejillas para mantenerlos lo más secos posibles.

Aplicación del adhesivo

Se aplica un gel especial de grabado ácido sobre la superficie de los dientes, dejando una textura rugosa para que así los brackets se adhieran mejor a la superficie. Después de unos minutos este gel se enjuaga y se seca para que quede bien fijado cada bracket.

Colocación de los brackets autoligables

Estos son colocados de forma individual, uno a uno, en la posición correcta siguiente el plan del tratamiento. Para que queden bien fijados y en correcta posición el ortodoncista utiliza una luz especial que endurece el adhesivo y fija los brackets a los dientes.

Inserción del arco

Cuando todos los brackets se encuentren colocados se inserta el alambre de arco que será el que aplique la fuerza deseada para movilizar los dientes. Los brackets autoligables no necesitan de ligaduras de ninguna clase, el profesional cerrará las puertas o los clips de los brackets sobre el arco y lo mantendrá en su lugar.

Ajustes y verificación final

Una vez el ortodoncista se asegure que todo el proceso de colocación se ha realizado con éxito, que todo está bien fijo y colocado, se le dará unas instrucciones al paciente de cómo mantener y cuidar su higiene bucal y se realizarán citas regulares para monitorear el progreso y realizar los ajustes necesarios.

En Clínica Dental Eduardo López somos referentes en ortodoncia en Córdoba, expertos en la colocación de brackets autoligables en Córdoba, contacta sin compromiso y asegura tu bienestar bucal.

Brackets autoligables ¿Qué son y qué ventajas ofrecen?